Como ya lo habré dicho otras veces, Hollywood aprovecha cualquier éxito para convertirlo en una franquicia con varias secuelas, un personaje lo suficientemente interesante que puedan explotar en televisión (ya sea con una serie o dibujos animados) y marketing externo (como juguetes, juegos de video, etc). Así sucedió con el famoso espía inglés James Bond, de quien se hizo una mediocre serie «James Bond Jr.», juguetes y 21 películas; la ganadora al Oscar como Mejor Guion, «M.A.S.H.»(1970), de la cual se hizo una exitosa serie que duró 11 temporadas y la tetralogía de Indiana Jones (cuya cuarta película fue un fracaso total), que derivó en juguetes y también en una serie llamada «The Young Indiana Jones Chronicles» (1992).

En 2008, con el personaje Bryan Mills, interpretado por Liam Neeson, en la película «Taken», obtuvieron un éxito que creyeron poder explotar. Dirigida por Pierre Morel y coescrita por Luc Besson («Colombiana»), «Taken» cautivó a los espectadores con la historia de un exagente de la CIA, que utiliza todos sus conocimientos para encontrar a su hija, la cual ha sido secuestrada en un viaje a Europa por una mafia que se dedica a la trata de blancas. En esa primera película, cargada de suspenso y mucha acción, con un guion medianamente interesante y atinados puntos de giro, Bryan Mills acaba con todos sus enemigos, incluyendo al hijo del cabecilla de una mafia en Albania, que ahora busca venganza en «Taken 2».

La secuela, esta vez dirigida por Olivier Megaton («Transporter 3») y nuevamente coescrita por Luc Besson, se volvió una repetición de la primera película, que contrario a sorprender a los espectadores, lo que hizo fue volverse totalmente predecible. El guion es totalmente absurdo, construyendo un universo diegético inverosímil e incoherente.

Bryan Mills se encuentra trabajando tres días en Estambul, Turquía, donde posteriormente se encuentra con su exesposa e hija para unas pequeñas vacaciones. Murad Krasnigi, el mafioso albanés, viaja a Estambul para secuestrarlos a los tres, con la amenaza de matar a Bryan y a su esposa y vender a su hija al peor prostíbulo del mundo.

La historia, en esta ocasión, carece de profundidad. Se trata simplemente de la forma de Bryan de acabar con todos los albaneses y salvar a su familia. En «Taken», vimos una búsqueda más a fondo, con momentos más intensos, en los que se mostraba el bajo mundo del tráfico de personas, entre otras cosas. En cambio, «Taken 2» se basa simple y llanamente en la acción de lo que parece ser un superhéroe que acaba con más de una veintena de asesinos. Eso no es todo, Bryan logra su objetivo con ayuda (en la mayor parte de la película) de su hija Kim. Vamos a ver… Si eres un exagente de la CIA que está trabajando en Estambul, debes tener algunos contactos en la Embajada de Estados Unidos. ¿Por qué no contactarlos a ellos con el minicelular que inexplicablemente llevas en el zapato? ¡No! Mejor usemos a mi joven e inexperta hija, que sin tener licencia, logró eludir policías y asesinos en una persecución automovilística.

Después está el hecho de que te están amenazando con matar a tu esposa, logras escapar y la dejas en el sótano donde los tenían prisioneros, prometiéndole que regresarás a buscarla. Está bien, ibas a salvar a tu hija a quien estaban siguiendo por los techos de Turquía, pero al menos saca a tu esposa y déjala en un lugar seguro. Aunque sea en la casa de al lado, no ahí, si sabes que cuando regreses no va a estar o la van a haber matado. Ese fue un punto de complicación un poco estúpido de la historia. No conforme con eso, le dices a tu hija que maneje a la Embajada de Estados Unidos, logras eludir a todos los que te seguían y aún así le dices a tu hija que atraviese la garita de seguridad de la embajada (custodiada por militares fuertemente armados) sin parar. ¿Por qué si ya no te venían siguiendo no te detienes en la entrada y le explicas a los guardias que son ciudadanos estadounidenses y que necesitan ayuda? ¿Por qué atravesarla, arriesgándose a que les disparen (lo que efectivamente pasó, pero milagrosamente salieron ilesos)?

No solo abandonó a su mujer en un sitio peligroso una vez, sino que cuando va a rescatarla por segunda vez, vuelve y la abandona en un cuarto de los villanos, para perseguir al cabecilla. O sea, ¿cuáles eran las prioridades del protagonista? ¿Salvar a su familia o matarlos a todos?

Protagonizada por Liam Neeson, la película también cuenta con las actuaciones de Famke Janssen («X-Men»), Maggie Grace («Knight & Day») y Leland Orser («The Bone Collector»), este último saliendo en dos mínimas escenas, a pesar de ser un gran actor. La actuación de Famke Janssen fue pésima (y que conste que me encantó en la trilogía de «X-Men»), limitando su personaje a gritar «No» y «Suéltenme».

Definitivamente, insisto en que el género acción, si bien se caracteriza por personajes que no tienen un arco de transformación en toda la película, puede ser mejor planteado cuando por lo menos nos preocupamos por brindarle al espectador una historia substancial, con un nivel de suspenso inteligente que no insulte el intelecto. Mírenla y juzguen por ustedes mismos.

Rating: 

 

(El máximo de pantallitas es 10)

Trailer: 

Escrito por: Enrique Kirchman