Con el auge de los superhéroes en los últimos años, desde la trilogía de Batman con «The Dark Knight», «The Avengers» y sus precuelas (y próximas secuelas), la esperada película de Superman, «Man Of Steel», que estrena este año y «The Justice League» que está tentativa para 2015; era de esperarse que la televisión no demoraría en sacar series alusivas a estos míticos personajes. En 2012, Warner Bros. y DC Entertainment estrenaron «Arrow», basada en el personaje Green Arrow, que todos conocimos en la serie «Smallville» y que apareció por primera vez en los pasquines de DC Comics, en la edición #73 de More Fun Comics en noviembre de 1941.
La serie «Arrow», protagonizada por el actor Stephen Amell («Private Practice» y «Heartland») como Oliver Queen/Arrow, cuenta la historia de un joven multimillonario, Oliver Queen, cuya familia es dueña de Industrias Queen, siendo una de las familias más poderosas de Starling City. En el episodio piloto nos enteramos que Oliver ha estado desaparecido por cinco años, luego que su yate se hundiera durante una fuerte tormenta y quedara varado en una isla al norte de China. En el bote iba su padre Robert, su amante Sarah Lance (hermana de la que era su novia, Laurel Lance) y personal que trabajaba para su padre, sin embargo, todos murieron, siendo Oliver el único sobreviviente. Oliver logra escapar de la isla al llamar la atención de un barco pesquero chino y pudo regresar a su ciudad, pero lo que vivió en esos cinco años lo ha marcado de por vida.
El que antes era un chico malcriado, impulsivo, mujeriego, poco importa, holgazán, fiestero y superficial; ahora se ha convertido en un hombre con principios, consciente de los problemas de la sociedad y enemigo de la injusticia. Poco a poco, en los siguientes episodios, nos vamos enterando de los negocios turbios en los que está envuelta su familia (su madre Moira y el que ahora es su padrastro y líder de las empresas Queen, Walter Steele) y los crímenes que habría cometido su padre, quien antes de morir le dejó un libro con los nombres de todas las personas de Starling City que andaban en negocios sucios y que necesitaban ser expuestos ante la justicia.
¿Cómo se convirtió Oliver Queen en Arrow? A medida que avanzamos en la historia, nos muestran el presente de Oliver y constantemente nos presenta flashbacks de su época en la isla y lo que tuvo que pasar, hasta convertirse en este superhéroe. El arco de transformación del personaje lo conocemos a través de estos viajes al pasado, donde se vio envuelto en secuestros militares, conspiraciones, entrenamientos, etc.
Una vez llega a la ciudad, Oliver se dedica a buscar a las personas que están en la lista de criminales y uno a uno los expone e, inclusive, los asesina, convirtiéndose en el misterioso ‘encapuchado’, uno de los más buscados por la policía, especialmente por el detective Quentin Lance, el padre de su exnovia Laurel y de Sarah. Sin saber que Oliver es quien está detrás del vengador encapuchado, Lance le tiene el ojo puesto a Oliver, a quien culpa de la muerte de su hija Sarah y del daño que le hizo a su hija Laurel. Por lo que Quentin Lance se convierte en su mayor obstáculo para hacer justicia en la ciudad.
Su exnovia Laurel le guarda un fuerte resentimiento pero aún lo ama, a pesar de que empezó a tener una relación informal con Tommy Merlyn, el mejor amigo de Oliver. Poco a poco las asperezas entre Laurel y Oliver van sanando y, éste, al enterarse de que su mejor amigo y su ex tienen una relación, lo acepta sin mayores problemas, a pesar de que aún la quiere.
Para poder seguir haciendo el papel de justiciero, Oliver no tiene más remedio que buscar aliados y exponerse un poco. Así conocemos a Diggle, su guardaespaldas. Luego que Oliver y Tommy fueran objeto de un secuestro del cual se pudieron librar airosos, Moira Queen contrata a Diggle como guardaespaldas de su hijo. A pesar de que Oliver hace lo imposible para despistar a Diggle y poder dedicarse a sus hazañas nocturnas, finalmente no le queda más remedio que confesarle a Diggle su identidad de Arrow. De esta forma, Diggle se convierte en una especie de Alfred/Robin para Arrow y lo ayuda a combatir el crimen.
Posteriormente, Oliver necesita a un cerebro tecnológico y científico que lo ayude con ciertas tareas de investigación que él no puede descifrar, por lo que recurre a la ayuda de Felicity Smoak, quien trabaja como soporte técnico en Industrias Queen. Mintiéndole acerca de los motivos de las tareas que le encomendaba, finalmente, Oliver también le confiesa a Felicity su identidad y ésta termina por unirse a su equipo.
En general, la serie cuenta con muchas escenas de acción y suspenso, que parecen atractivas para la fanaticada de los cómics, sin embargo, por algún motivo, se queda un poco corta. El personaje de Oliver Queen/Arrow no nos llega a convencer. Los creadores de la serie quisieron entregarnos un personaje con características psicológicas marcadas basadas en sus traumas como náufrago y esos cinco años en una isla donde vivió aterradoras experiencias, sin embargo, Stephen Amell no logra transmitirnos ese dualismo de conflicto interno que sí hemos creído en otros superhéroes como Batman. Hay un gran bache de información que nos impide creer que un casanova superficial y millonario se haya convertido en un justiciero o ‘vigilante’ (como lo llaman en la serie).
Con 17 episodios realizados hasta el momento, en su primera temporada, hay muchísimos cabos sueltos dentro de la historia. Mientras tratan de explicarlo a través de los flashbacks, este recurso me parece aburrido y una salida fácil para explicar algo a lo que le pudieron añadir mayores niveles de dificultad y complicación, generando mayor misterio. Las escenas de Oliver en la isla son tediosas y tontas, a pesar que tratan de presentarlas como un momento crucial y definitivo en la vida del personaje.
El presente de Oliver, en cada episodio, se trata solamente de noches en discotecas, escapes nocturnos para ajusticiar a algún criminal y excesivos encuentros con la policía (como Oliver o como Arrow). Los episodios se vuelven repetitivos, siguiendo un patrón en el que vemos a Oliver entrenando, luego busca su lista de criminales, elige a uno, sale a capturarlo, algo sale mal, luego lo intenta de nuevo, sale exitoso y se acaba el capítulo; intercalándolo con imágenes del pasado y uno que otro roce con su familia. El final de cada episodio no genera ganas de ver el próximo, más que porque se nos antoje ver algo de acción. No hay un suspenso general en la línea de acción que haga surgir dudas y cuestionamientos en los espectadores; ya que el guion es tan predecible, que no nos molestamos siquiera por buscar una respuesta.
Los villanos que hemos conocido hasta ahora son presentados como los más despiadados. Son realmente asesinos a sangre fría, pero son liquidados sin el mayor inconveniente. En otras palabras, los antagonistas son tan débiles y tan mal caracterizados, que hacen al protagonista menos interesante. Arrow siempre triunfa. ¿Dónde está su Joker o su Lex Luthor? Necesitamos un némesis para Oliver Queen. Alguien como Moriarty para Sherlock Holmes, que en verdad despierte el suspenso entre escena y escena y entre episodios.
Las líneas de relación o las subtramas, como la relación de Oliver con su hermana Thea Queen (a quien Oliver llama Speedy) es totalmente superficial. Son dos hermanos muy unidos, sin embargo, no se profundiza en esa relación. Vemos los mismos problemas de Thea con las drogas, los malos tratos a su madre y los reproches a su hermano; y a este último tratando de hacerla entrar en razón en cada episodio, sin mucho éxito. Así como los riesgos en sus peleas son mínimos, los riesgos en sus relaciones también lo son. Lo vimos involucrarse con una ‘antihéroe’ conocida como ‘The Huntress’ (La Cazadora) quien buscaba vengarse de su mafioso padre por asesinar a su prometido. Oliver se involucra con ella sentimentalmente, pero después de unos episodios no sabemos más nada de ella y Oliver queda involucrándose con la detective McKenna quien apareció de la nada en otro episodio. Ninguna relación parecer ser constante ni importante, por lo que no representa ningún riesgo para el protagonista.
También actúan Katie Cassidy como Laurel Lance, Willa Holland como Thea Queen, Colin Donnell como Tommy Merlyn, David Ramsey como John Diggle, Susanna Thompson como Moira Queen, Emily Bett Rickards como Felicity Smoak y Paul Blackthorne como el detective Quentin Lance.
La serie, a grandes rasgos, puede resultar entretenida, pero si no mejora su guion, no le doy mucho tiempo de vida, aunque ya se dijo que fue aprobada para una segunda temporada. Su episodio 18, titulado ‘Salvation’, estrena el miércoles 27 de marzo de 2013. Aquí los dejo con el trailer.
Promo ‘Salvation’ – Episodio 18 de «Arrow»:
Escrito por: Enrique Kirchman