Bueno, parece ser que Frank Gallagher consiguió vivir un día más después de tanto martirio por conseguir un trasplante de hígado durante toda la cuarta temporada. Aparentemente, él es la prueba viviente de que «hierba mala nunca muere«. Ahora con un nuevo hígado, Frank regresa —a pesar de las advertencias de su médico— a su tan añorada botella. Y debo decir ¡Gracias a Dios! Ya no soportaba más ver a Frank decaído, débil y sin su habitual sentido del humor negro, su filosofía de vida sarcástica, y su inescrupulosa viveza.

La verdad es que la cuarta temporada de «Shameless» estuvo un poco sonsa y aburrida con Frank enfermo, Fiona enfrentando cargos por negligencia y posesión de drogas, e Ian con su nuevo trabajo de gigolo que prácticamente no lo vimos hasta mitad de la temporada. Pero por suerte, como dije antes, ya Frank regresó a la botella, así que lograremos escuchar más sus quejas en el bar y verlo timar a cualquier indefenso para salirse con la suya, más allá de que volverá a caer en las garras de Sheila, que logró casarse con él para adoptar, sin éxito, a un grupo de niños de una tribu india; otra de las cosas que me pareció genial que no sucedieran, porque esos niños no tiene cabida en la serie.

En cuanto a Fiona, ya vimos que salió de la cárcel, tiene un nuevo trabajo que le consiguió la oficial Gail Johnson en un restaurante, donde trabaja para un tal Charlie Peters que será como su sponsor para mantenerla bajo vigilancia en sus reuniones grupales para dejar las drogas. No sé qué pasará en la quinta temporada, pero algo me dice que Fiona se enredará, al menos sexualmente, con el tal Charlie, e incluso puede que lo corrompa y caigan ambos en el uso de sustancias ilícitas. Pero lo más inquietante fue ver la escena de los créditos finales cuando Steve, quien se presumía muerto en manos de unos narcotraficantes, apareció en un auto con una chica, frente a la casa de los Gallagher, pero no quiso bajarse. Solo pasó para observar la casa. ¿Regresará Steve a la serie? Parece ser que los productores aún no se deciden si introducirán al personaje nuevamente como regular. Tendremos que esperar.

De ahí pasamos a Lip, quien parece estar cada vez más involucrado con la algo obsesiva e intensa Amanda, que parece considerarlo su ‘amigo con derecho’, a quien además le compra ropa, le da el carro, lo alimenta y lo mantiene organizado. Siendo Lip, quien no cuenta con mucho dinero, esta es una oportunidad caída del cielo, pero aparentemente él sigue enamorado de Mandy Milkovich, pero la continúa hiriendo… Y bueno, Mandy tampoco se decide en dejar a su violento y actual novio.

A propósito de los Milkovich, finalmente Mickey salió del closet. ¡Excelente episodio! Aunque le costó algunos golpes de su padre, finalmente le sirvió para colocarlo de vuelta en la cárcel y poder seguir su relación con Ian, quienes definitivamente están enamorados. Mickey trata de adaptarse a su vida luego de que gritó a los cuatro vientos que es gay, y hay algo de este episodio que me gustó cómo lo manejaron «a nadie le importa con quién te acuestes», le digo Kevin a Mickey, luego de que nombraron a personalidades como la presentadora de televisión Ellen Degeneres, el actor Neil Patrick Harris,  el jugador de fútbol americano Michael Sam y el jugador de baloncesto Jason Collins, entre otros famosos que salieron del closet y causaron sorpresa. En otras palabras, los chicos en el bar le hicieron ver a Mickey que tenía que relajarse y dejar de importarle lo que hablen los demás.

El problema que enfrenta Mickey ahora es que Ian cayó en una depresión que parece ser hereditaria de su madre: el problema de la bipolaridad. Así que en la quinta temporada nos tocará ver a Ian recuperarse de su enfermedad. ¿Quedará internado en un psiquiátrico? O, ¿lo dejarán en casa de Mickey, como éste sugirió, hasta que se recupere? Creo que el cambio de escenario en la serie a un psiquiátrico sería ideal, y ver qué clase de estragos llega a hacer Ian; al menos de que aparezca su madre y ella lo ayude a mejorarse desde casa.

Mientras Debbie ya se resignó a que Matty no va a acceder a ser su novio ni tener relaciones con ella por ser tan pequeña, el que parece haber conocido el amor a niveles muy románticos fue Carl con su nueva amiga Bonnie, quien a pesar de que le encanta estar con Carl y hacer travesuras —y actos delincuentes— con él, le dejó claro que no quería enseriarse en una relación. Carl incluso le regaló un collar de oro (que se robó), pero ella lo rechazó. Acto seguido, Bonnie desapareció con sus hermanos y Carl no supo a dónde se fueron. Ahora, en la escena de Carl con Frank, cuando Frank bebe alcohol por primera vez desde que salió del hospital, Carl también bebe y se le nota cierto placer al beber. ¿Será que Carl presentará problemas con la bebida en la quinta temporada por un despecho amoroso?

La serie en general no fue tan buena en esta cuarta temporada, pero tuvo algunos momentos que fueron apreciados. Está de más decir que al tratarse de tan magníficos actores, uno tiende a ignorar el hecho de que las historias se tornaron un tanto aburridas; porque la verdad es que todos actúan excelente. «Shameless» cuenta con la participación de William H. Macy (como Frank), Emmy Rossum (como Fiona),  Jeremy Allen White (como Lip), Cameron Monaghan (como Ian), Emma Kenney (como Debbie), Ethan Cutcosky (como Carl), Steve Howey (como Kevin), Shanola Hampton (como Veronica), Joan Cusack (como Sheila), Noel Fisher (como Mickey), Emma Greenwell (como Mandy) y Justin Chatwin (como Steve). Creo que al menos a Rossum y a Macy deben de nominarlos por su actuación en los premios Emmy que vienen proximamente. «Shameless» volverá con su quinta temporada, lo más probable que en enero de 2015.

Escrito Por: Enrique Kirchman