
Recientemente, el actor británico Jude Law estrenó en Roma, Italia el corto publicitario «The Gentlemen’s Wager II» (La Apuesta de los Caballeros II), una secuela de la historia que empezó en 2014, protagonizada junto al italiano Giancarlo Giannini, que promociona el whisky Johnnie Walker Blue Label, presentando exquisitez y alta calidad no solo en cuanto a sus personajes, sino también en cuanto a la historia que recrea y los ambientes y locaciones en que se desarrolla la puesta en escena.
Foto: Jude Law en una escena de «The Gentlemen’s Wager» con Giancarlo Giannini.
«The Gentlemen’s Wager» empezó con Jude Law haciendo de Jude Law, mientras se relaja en el bote de su amigo y colega Giancarlo Giannini. Law está maravillado con este astillero Baglietto de Varazze que data de 1928 y le propone a Giannini que quiere comprarlo, pero no con dinero, sino a través de una apuesta que consiste en montar una pieza de danza. Así, Law cita a Giannini en un salón y le prepara una pieza a la que Giannini no se puede resistir. ¡Sin duda, es divertida!
«The Gentlemen’s Wager» – Parte 1:
En noviembre de este año, Johnnie Walker Blue Label lanza «The Gentlemen’s Wager II», que continua con la amistad «invaluable» de estos dos actores, esta vez con la visita de Law a la mansión de Giannini en Villa Mondragone, Roma, donde guarda un auto clásico Delahaye 135S, que inmediatamente llama la atención de Law, quien le propone nuevamente comprárselo a través de una apuesta. Esta vez, la apuesta consiste en que arreglará el coche y manejará desde Roma a Mónaco en 20 horas. Giannini acepta e incluso le ofrece la casa si lo logra. De ahí, Law inicia su travesía enfrentándose a distintos obstáculos, entre esos, ayudar a una mujer en apuros, interpretada por Zhao Wei. Obviamente, al final, Law consigue llegar a tiempo y se queda con la mansión y el coche coleccionable, mientras que Giannini parece haberse quedado con la chica.

Ambos cortos, dirigidos por Jake Scott, quien ha trabajado primordialmente como director de videos documentales musicales de bandas como Radiohead, R.E.M., U2, The Cranberries, The Smashing Pumpkins, entre otros, cuentan con una estética que, salvo por los constantes (y obvios) planos detalles de la botella de Blue Label, nos remite a las películas de Wes Anderson, con situaciones cómicas, encuadres muy bien cuidados y prolijos, un montaje fluido con muchos cortes y ritmo externo, colores vivos y primarios, y en fin, una historia atractiva que raya en el absurdo, pero es eso lo que precisamente la hace divertida.
«The Gentlemen’s Wager II»:
Escrito Por: Enrique Kirchman