Escrito por: Enrique Kirchman
Las nominaciones a los Golden Globes 2021 vinieron con muchas sorpresas —algunas muy buenas y otras muy, pero muy malas— y entre las más gratas y sin precedentes se encuentran los nominados a Mejor Director, en donde, por primera vez, las mujeres lideran la categoría con la mayor cantidad de nominaciones. Los consagrados realizadores David Fincher y Aaron Sorkin, nominados por «Mank» y «The Trial Of The Chicago 7» respectivamente, se enfrentan a la ya experimentada directora china Chloé Zhao por su trabajo en «Nomadland», a la debutante británica Emerald Fennell por «Promising Young Woman» y a la afroamericana Regina King, quien debuta también como directora de largometraje para cine con «One Night In Miami».
Creo que de todas las categorías de los Golden Globes, esta es la más impredecible, porque de lo poco que se pudo rescatar de 2020, estas películas se destacan, no solo por un gran trabajo de dirección, sino por una gran puesta en escena, relato y producción en general. Sin embargo, creo que el premio está reservado para alguna de las féminas. Por un lado, porque si con tres nominadas le gana un hombre, eso será altamente injusto y, por ende, criticado. Por otro lado, y más importante aún, por que el trabajo de las mujeres definitivamente se destacó por tener un toque más profundo, reflexivo e íntimo, como solo se lo podría dar el punto de vista femenino.

Chloé Zhao nos entrega una obra profundamente poética con «Nomadland», que nos remite a ese concepto de caméra-stylo de la que una vez habló Alexandre Astruc y que se constituyó como el fundamento de la Nouvelle Vague francesa y el cine de autor, haciendo la comparación de que la cámara es para el director lo mismo que el bolígrafo para el escritor. Y es que Zhao parece lograr esa exploración interna de la trama y, principalmente, del personaje protagónico interpretado por Frances McDormand, cual obra literaria, a través de la cámara y de los recortes que elige mostrarnos. El manejo de la temporalidad y espacialidad como hoja en blanco para que Zhao despliegue su relato de forma casi caligráfica, es lo que más resalta de su trabajo como directora, y ese interés recurrente por abordar el viaje del personaje.

Mientras tanto, en «One Night In Miami», Regina King se preocupa más por una historia que enfatiza en los conflictos interpersonales que surgen entre cuatro icónos del Movimiento por los Derechos Civiles en Estados Unidos: el activista Malcolm X, el cantante Sam Cooke, el jugador de la NFL Jim Brown y el famoso boxeador Cassius Clay, antes de convertirse en Muhammad Ali. El significante estrella de la película es la palabra, a través de los diálogos acalorados entre estos cuatro personajes que disciernen acerca de su apoyo al movimiento, y King se encarga de captar y resaltar esas emociones, expresiones y el ego de estas célebres personalidades con una variedad de planos, en su mayoría cerrados, limitados, en gran parte, por la espacialidad de una habitación de hotel, en donde el espectador participa también como mediador, intentando encontrar un acuerdo entre las partes.

Sin embargo, mi favorita de este trío femenino es la actriz y ahora directora y guionista Emerald Fennell, quien definitivamente me voló la cabeza con «Promising Young Woman». Fennell nos manipula placenteramente a su antojo, atravesándonos por distintas emociones, producto del híbrido de géneros cinematográficos que estructuran la trama, y nos hace parte de la incomodidad y el acoso que experimenta una mujer a merced de una sociedad machista. La estructura narrativa, el montaje, la dosificación de la información, el desarrollo de los personajes, la elección sonora, todo está tan bien cuidado, que definitivamente nos brinda una película completa con un final, agridulce, pero a su vez, gratificante.
No hay duda de que la pelea está entre estas tres mujeres y me atrevo a reducir la contienda entre Zhao y Fennell, tanto en dirección como en guion. ¿Podrán los premios Oscar presentar esta misma tendencia en su nominación a Mejor Dirección? ¡Deberían! Porque, reitero, estas tres mujeres tienen en su haber lo mejor que se estrenó en 2020.
En la historia de los Golden Globes, desde su primera edición en 1944, solo una mujer ha ganado el premio de Mejor Dirección. La actriz y cantante Barbra Streisand hizo historia en 1984, durante la 41.ª edición de las premiaciones, al convertirse en la primera mujer en ser nominada como mejor directora y ganar por la película «Yentl». Posteriormente, en 1992, repitió otra nominación por «The Prince Of Tides», la cual perdió ante Oliver Stone por su bio-pic «JFK».
Dos años más tarde, Jane Campion se sumó a la lista gracias a su trabajo en «The Piano», pero fue superada por Steven Spielberg con «Schindler’s List». No fue hasta 10 años después que Sofia Coppola recibió una nominación por su extraordinaria dirección en «Lost In Translation», pero perdió frente a Peter Jackson con «The Lord Of The Rings: The Return Of The King». Desde entonces, la frecuencia de mujeres nominadas empezó a aumentar con Kathryn Bigelow recibiendo una nominación en 2010 por «The Hurt Locker» y en 2013 por «Zero Dark Thirty», las cuales perdió frente a su exesposo James Cameron con «Avatar» y a Ben Affleck por «Argo», respectivamente. La última en tener el honor fue Ava DuVernay por el drama «Selma», pero ese año el galardón se lo llevó Richard Linklater por «Boyhood». Todo parece indicar que en esta 78.ª edición —37 años después de Streisand—, finalmente ganará la segunda mujer directora, lo cual significaría una victoria para el liderazgo de la mujer dentro de la industria al dejar una reafirmación de «igualdad», al ser la primera vez que hay más de una mujer nominada en la categoría de dirección y, además, diversas: una china, una británica y una afroamericana.