«Beautiful Creatures» es el primer libro de la saga de cuatro libros conocida como «Caster Chronicles» de las escritoras Kami García y Margaret Stohl. Fue publicado en Estados Unidos el 1 de diciembre de 2009, seguido de «Beautiful Darkness» (2010), «Beautiful Chaos» (2011) y «Beautiful Redemption» (2012). En febrero de 2013, el director Richard LaGravenese llevó a la pantalla grande la adaptación de «Beautiful Creatures» en un intento de crear el auge cinematográfico que causó, inexplicablemente, la saga de «Twilight»; pero no llegó a superar ni a igualar las expectativas.

La historia rodea lo sobrenatural, pero esta vez, en lugar de vampiros, se trata de brujas en el pueblo de Gatlin en Carolina del Sur. La premisa es bastante sencilla. Una chica adolescente procedente de una familia de poderosos brujos está por cumplir la edad en que se definirá si será una bruja de la luz o de la oscuridad. La chica, de nombre Lena Duchannes, está bajo la protección de su tío Macon Ravenwood, quien se asegura de que Lena se mantenga lejos de su madre Sarafine, una malvada bruja que pretende llevar a su poderosa hija al lado oscuro cuando llegue la próxima luna nueva. Para evitar que Lena se incline por el lado oscuro, deben alejarla de Ethan, un chico de su colegio que se ha interesado por ella, a pesar de los rumores del pueblo de que Lena y su familia hacen pactos con el diablo. De esa forma, Lena y Ethan se enamoran, lo cual constituye un peligro, porque su madre se asegurará de que algo trágico le suceda a Ethan, para que la ira de Lena la lleve al lado oscuro.

En resumidas cuentas, la historia no presenta ningún giro realmente inesperado ni ninguna sorpresa en cuanto a su resolución. A pesar de los intentos de su madre, Lena logra derrotarla y queda parcialmente dividida entre la luz y la oscuridad, teniendo pleno control de sus poderes. Ethan, a quien le han borrado la memoria y no recuerda haber conocido a Lena, finalmente la recobra y vuelve a su lado.

LaGravenese trató de cautivar a un público joven con esta historia, especialmente al público femenino, pero la estética raya en lo infantil, más que en lo juvenil. La premisa es otro cliché del género y la historia en sí es bastante tonta y predecible. De momentos se hace bastante aburrida, por su falta de dinamismo en las escenas y la incapacidad de los personajes de crear un vínculo con el espectador. Ojo, los personajes son malos, mas no lo son del todo los actores.

La película es protagonizada por una emergente Alice Englert («In Fear») y el actor en ascenso Alden Ehrenreich («Stoker»), a quien recientemente lo hemos visto participar de películas bastante exitosas (salvo por ésta). El peso en el elenco lo aportan los actores secundarios como Emma Thompson («Love Actually»), Jeremy Irons («The Borgias»), Viola Davis («The Help») y Emmy Rossum («Shameless»). Aunque Englert no lo hizo mal, su personaje en realidad me pareció el más aburrido de todos. Es muy parecido al personaje (y repetida actuación) de Kristen Stewart. Sin embargo, Ehrenreich le dio un toque más humorístico y más rítmico a la historia, captando nuestra atención en algunas escenas. Con respecto al resto del elenco, la más destacada en realidad (en toda la película) fue Emma Thompson con su doble personaje de la Sra. Lincoln, cuyo cuerpo utilizó la malvada Sarafine para poseerla y poder andar en el mundo de los vivos. Ese dualismo en su personaje fue bastante divertido y cómico al ver a Thompson pasar de un acento sureño (como la señora Lincoln) a un acento inglés (como Sarafine). Viola Davis tuvo un papel más serio y sobrio que no restó ni agregó nada. Mientras que los personajes de Irons y Rossum me parecieron muy exagerados y casi teatrales. En general, las actuaciones no fueron malas, sino que los personajes no eran lo suficientemente interesantes o atractivos para semejantes actores, que estoy seguro que hicieron lo imposible por salvar la historia. El director no supo aprovechar tanto talento.

Definitivamente, si LaGravenese pretendía llenarse los bolsillos con una nueva saga basada en historias de brujas, creo que el tiro le salió por la culata, ya que difícilmente podrá generar el efecto «Twilight» en un público adolescente que recién está saliendo del auge de la saga vampiresca (por más mala que me siga pareciendo esa saga). Creo que con esta mala primera parte, ninguna productora se arriesgará a darle el dinero para hacer una segunda película basada en la saga de libros «Caster Chronicles».

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Escrito Por: Enrique Kirchman