Personalmente, soy un gran admirador de las películas del director Wes Anderson. Logró captar mi atención cuando vi «The Royal Tenenbaums» (2001), una película con una estética increíble, una fotografía impecable y una historia con un toque de comedia refinada. Sus historias y personajes son atemporales y hasta cierto punto surreales, lo cual resulta aún más atractivo. En esta ocasión, «Moonrise Kingdom» no se quedó atrás. Anderson nos mostró una continuidad de su estilo en el cual es fácilmente reconocible su autoría.
Esta comedia con matices infantiles, pero cuyo contenido y tonalidad son apreciables por un público adulto, cuenta la historia de dos niños. Sam es un niño huérfano, miembro de los ‘khaki scouts‘, a quien le resulta difícil hacer amistades. Su peculiaridad hace difícil que el resto de los ‘scouts‘ lo integren. Un año antes del presente de la historia, Sam estaba en una obra teatral infantil en donde vio por primera vez a Suzy, una chica igualmente peculiar a quien Sam encaró en los vestidores, causando gran impresión en ella, por lo que ella le envía un papel con su dirección de correo para que Sam le escriba. Desde entonces se convirtieron en confidentes por correo, hasta que acordaron un plan para escaparse juntos y vivir en el bosque. La desaparición de ambos da inicio a una búsqueda intensiva por parte de la familia de Suzy, el capitán Sharp de la policía, una representante del servicio social, el maestro ‘scout‘ Ward y el resto de sus compañeros ‘scouts‘.
Lo primero que hay que destacar de este filme es su cuidada fotografía. Tanto sus planos generales como los más cerrados gozan de una cuidada composición que lo hacen agradable a los ojos del espectador. Hay un gran uso del travelling que sigue a los personajes de lado por una secuencia de distintos decorados que en cada fotograma mantiene un desplazamiento de personajes y la colocación de la utilería de forma tal que guarda una composición perfecta. Cuando no usa el travelling, el director elige planos fijos con gran dinamismo gracias al ritmo interno que le dan sus personajes realizando alguna acción.
Foto: El cuadro titulado «Regata En Argenteuil» de Claude Monet, cuya referencia es utilizada en un plano de «Moonrise Kingdom».
Su estética es prácticamente sacada de un cuadro de Claude Monet, debido a los escenarios que muestra y el predominio de los colores primarios, esto es más notable cuando vemos los planos generales o de establecimiento. Mientras que en «The Royal Tenenbaums» predominan los colores rojos y naranjas, y en «The Life Aquatic With Steve Zissou» predominan los verdes y celestes; en «Moonrise Kingdom» hay un gran predominio del color amarillo. Como hemos visto, el uso de los colores primarios es muy característico de Anderson, tal cual como lo hacía Monet en sus pinturas; ambos tiene cierta predilección por los paisajes, herbasales y los lagos. Esto denota un gran trabajo, de igual manera, en la dirección de arte. Tanto los decorados naturales como los construidos fueron elegidos acertadamente para acompañar no solo la historia, sino también los encuadres requeridos.
No se puede dejar de lado las actuaciones. Mientras que la película cuenta con un gran elenco de actores como Bruce Willis («Red 2»), Frances McDormand («Burn After Reading»), Edward Norton («Fight Club»), Bill Murray («Lost In Translation»), Tilda Swinton («We Need To Talk About Kevin»), Harvey Keitel («Reservoir Dogs») y Jason Schwartzman («Fantastic Mr. Fox»), quienes hicieron un gran trabajo; en realidad, la actuación más destacada es la del pequeño Jared Gilman (que interpreta el personaje de Sam), quien hace su debut en la actuación con esta película y probó tener un gran talento ofreciendo una nivel actoral natural y cómico.
Definitivamente que «Moonrise Kingdom» es una película divertida, tierna, que tal vez no nos haga reír a carcajadas, porque como dije al principio, no se trata de una comedia vulgar y popular, sino de una comedia refinada, con un tono muy elegante y diálogos muy selectos, que nos harán sonreír por la ternura de los protagonistas y las reacciones del resto de los personajes. Recomiendo 100% que la vean, ya que además viene de la coescritura entre Wes Anderson y Roman Coppola, ambos nominados al Oscar.
Trailer:
Escrito Por: Enrique Kirchman
Una historia que vale mucho la pena, es muy tierna como dices, pero también muy divertida. Rudin quien es el productor, ha realizado muy buenos trabajos últimamente. éste es mi favorito.
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