{Crítica} «Black Widow»: Un ‘homenaje placebo’ para salir del paso


scarlett_johansson

Escrito Por: Enrique Kirchman

***Advertencia: Datos importantes de la película son revelados***

Desde que Scarlett Johansson apareció por primera vez  en Iron Man 2 (2010) bajo el alias Natalie Rushman —para revelarse posteriormente como la agente de S.H.I.E.L.D., Natasha Romanoff/Black Widow— el público quedó inmediatamente cautivado por la presencia de una mujer inteligente, físicamente ágil, de armas tomar y, además, hermosa dentro del universo de Marvel en el que, hasta el momento, predominaba el ego y la fuerza bruta masculina encarnada en Tony Stark y Hulk.

No fue solo la sensualidad asesina de la espía rusa lo que nos atrajo de su personalidad, sino también su arco de transformación a lo largo de una década de películas y una línea de relación que apeló, en su momento final, a las emociones de los espectadores al conmovernos con el desarrollo de una estrecha amistad con Clint Barton/Hawkeye y un platónico romance con Bruce Banner/Hulk. Ambas relaciones, sumado a ese breve flashback que vimos de ella en Avengers: Age of Ultron, en el cual, hechizada por Wanda Maximoff, recuerda su tenaz entrenamiento cuando era una joven espía, nos dejaron con la curiosidad de querer conocer más a fondo el origen de Black Widow y, tal vez, de sus misiones con Hawkeye, de las que tanto hablaban entre ellos durante la saga.

Captura de Pantalla 2021-07-14 a la(s) 1.50.38 a. m.

Sin embargo, Marvel parece haberse dado cuenta tarde de la relevancia y el atractivo comercial de sus heroínas. Desde 2008 con Iron Man y The Incredible Hulk hasta 2018 con Black Panther, todas las películas individuales de los Vengadores tuvieron como protagonista a un héroe masculino. Recién en 2019 —tal vez motivados por los movimientos #MeToo y #TimesUp— fue que decidieron dedicarle una película exclusiva a una de sus féminas, en este caso, introduciendo al nuevo personaje de Carol Danvers/Captain Marvel (interpretada por Brie Larson) que, si me preguntan, creo que hubiese podido no aparecer en la saga y no hubiese afectado en lo absoluto los resultados de la tercera fase de Marvel. Pero eso es harina de otro costal. Lo que intento decir es que tomó 10 años para que le dieran su propia película a una de las heroínas y, cuando lo hicieron, se la dieron a la equivocada. Aquella vez debió ser, por derecho, para Black Widow.

LEA TAMBIÉN: El depravado mito de las estrellas y la cultura del ‘casting couch’ en Hollywood

Luego de (spoiler alert) la muerte de Natasha Romanoff en aquella conmovedora escena de Avengers: Endgame, el público quedó conmocionado (me incluyo) y obviamente quería ver más de ella. Nunca nos imaginamos que iba a tener un final tan trágico (lo acabo de ver nuevamente y se me aguaron los helados), por lo que comercialmente funcionaba hacer una precuela del personaje para estirar la empatía que había generado. Sin embargo, la película Black Widow, que estrenó recientemente, se sintió como un «homenaje placebo» o una jugarreta comercial, ya que cinematográficamente hablando, nos presentaron una historia emocionalmente forzada, un relato lento y aburrido y unos personajes mal explorados, que en su totalidad no le hacen honor a una de las heroínas más destacadas y grandiosas del universo diegético de Marvel.

news-black-widow-2021-review-2

Natasha Romanoff es un as de la manipulación. Una espía que sabe adentrarse en la psiquis de sus oponentes para sacarles información. Recordemos la secuencia inicial en The Avengers, cuando está siendo violentamente interrogada por quienes parecen ser unos contrabandistas rusos. Inicialmente pensaríamos que Black Widow estaba en aprietos, pero realmente tenía la situación bajo control. Y eso lo descubrimos cuando el agente Coulson llama al celular de uno de los contrabandistas y exige hablar con Natasha, quien al saber que Barton está en problemas, se libera con facilidad y vence en un ágil combate cuerpo a cuerpo a los tres criminales. Y no olvidemos cuando se infiltró como la asistente del departamento legal de las Industrias Stark bajo el nombre Natalie Rushman en Iron Man 2 para vigilar de cerca a Tony Stark, comandada por Nick Fury. En el mismo filme fue que la vimos derribar sin complicaciones a una decena de agentes de seguridad en la torre de Industrias Hammer, mientras Happy, simultáneamente, intentaba derribar solo a uno con bastante dificultad. Natasha Romanoff es un arma en sí misma. Entre sus habilidades mentales y físicas y sus gadgets de combate, parece una mezcla entre James Bond y la mutante Mystique —que por cierto, hubiese sido excelente ver un combate entre Black Widow y Mystique en algún universo conjunto—.

Esa Natasha que vimos durante la tercera fase de Marvel no fue la misma que vimos en la precuela Black Widow. Su personaje carecía de la misma proyección y fuerza. En una de las escenas del primer acto, cuando el secretario de Estado Thaddeus Ross va en busca de ella para capturarla con un escuadrón especial, pensamos que íbamos a ver la misma secuencia de acción de las pasadas películas, sin embargo, nos topamos con una Black Widow evasiva que decide huir sin regalarnos el placer de verla patear algunos traseros. Pero más allá de la acción, la película carece del toque de espionaje que uno esperaría de esta sagaz heroína; su capacidad de infiltrarse y recurrir al engaño para conseguir información, aquello para lo que fue entrenada. Incluso, las peleas cuerpo a cuerpo quedaron agotadas en los primeros 45 minutos. Ni siquiera al final nos ofreció el nivel de acción esperado.

Captura de Pantalla 2021-07-14 a la(s) 1.49.47 a. m.

La trama de Black Widow se concentró en mostrarnos un forzado —y un poco cursi— «drama familiar» entre personajes que no habíamos visto antes, por lo que nos costaba aún más relacionarlos a la historia de Natasha Romanoff y empatizar con ellos. Realmente esperaba ver a Hawkeye en esta historia, precisamente para que nos diesen esa última mirada de estos dos grandes amigos, sobre todo de quien la vio morir en sacrificio para salvarlo a él, por su familia. ¡Esto me faltó! Si la película hubiese incluido a Hawkeye, las emociones hubiesen sido mejor potenciadas que con personajes que se mantuvieron inexistentes durante todo lo que vimos de la espía en una década.

Largos diálogos con su falsa familia adoptiva integrada por su hermana Yelena (Florence Pugh), su padre Alexei (David Harbour) y su madre Melina (Rachel Weisz) fueron los que compusieron la mayor parte del segundo acto, tratando de engullirnos una línea de relación con personajes del pasado de la heroína. Y aunque valoro que se le dé profundidad a Natasha, en este caso, esa subtrama ralentizó la línea de acción principal haciéndola de momentos aburrida y hasta confusa. Se crea una pausa narrativa para dedicársela a la explicación del origen de los demás personajes y su vinculación con la protagonista.

Captura de Pantalla 2021-07-14 a la(s) 1.51.28 a. m.

Por su parte, la figura antagónica encarnada por Dreykov (Ray Winstone) —que me recordó a William Stryker en X-Men 2— tardó casi que 90 minutos en manifestarse propiamente tal, de ahí que se enfocan en el encuentro de Natasha con su familia en una misión cuyo objetivo no se aclara hasta muy avanzado el segundo acto. Adicionalmente, la película en sí se siente algo aleatoria, irrelevante tal vez, paralela a lo que estaba sucediendo con el personaje y el resto de los Vengadores luego de los eventos ocurridos en Captain America: Civil War. En otras palabras, se siente como una historia relleno, cuyo objetivo era cumplir con el compromiso de «honrar» a la mujer más respetada de Marvel; mas no lo logran.

Fuera de mi decepción narrativa y de algunos personajes no tan atractivos —tampoco me deslumbró David Harbour ni Rachel Weisz—, la película tiene un final aceptable, a pesar de que no vemos el combate deseado para despedir a Black Widow, manteniendo un buen clímax. Por otro lado, queda sobreentendido y bien evidenciado el mensaje feminista de liberar a la mujer del machismo y el patriarcado que predomina aún en nuestra sociedad mundial. Esta analogía queda literalmente representada en el control que ejercía Dreykov sobre el resto de las viudas negras que conformaban su ejército personal del cual emergieron Natasha y su hermana Yelena.

Yelena-Belova-Marvel-Viuda-Negra..

La otra intención de esta película fue introducir a la nueva portadora del título de Black Widow, Yelena Belova, no sin antes montarle una persecución a Hawkeye, luego del ofrecimiento que le hace la Condesa Valentina Allegra de Fontaine (Julia Louis-Dreyfus) en el desenlace de la película, metiéndole la idea de que él es el responsable de la muerte de Natasha. Esta historia se verá mejor explorada en la serie Hawkeye, a finales de este año por Disney+, en cuyos ocho episodios volververá a aparecer Pugh en su rol de Yelena y Jeremy Renner como Clint Barton, además de la heredera de las flechas, Kate Bishop (interpretada por Hailee Steinfeld). Queda pendiente dilucidar las intenciones de Valentina de Fontaine como una de las villanas de esta fase 4 —muy al estilo de Lex Luthor en el universo DC—, reclutando a John Walker/Falso Capitán América (Wyatt Russell) y a Yelena en una especie de liga antivengadores. ¡Aún hay Marvel para rato!

Rating: 06

Trailer:

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s